—Estar con el agua al cuello…

—Horrible la situación en Guantánamo con las lluvias y las inundaciones.

—Me refería al diluvio que nos ahoga desde mucho antes de la temporada ciclónica. Díaz-Canel, «en esa suerte de alto en el camino que busca llegar al final del 2024 en mejores condiciones», prosigue intercambios y recorridos que dan «luces sobre los caminos que harán posible superar el complejo momento que hoy vive la Mayor de las Antillas».

—¿Dar luces? De liniero le va a ir mejor que de jefe de Estado.

—Ha disertado sobre «el valor de desterrar la filosofía de la queja ante aquello que no se tiene, y entronizar la pregunta de qué puede hacerse a pesar de lo que falta».

—Al que hay que desterrar es a él. Qué manera de entronizarse hablando boberías.

—«Transformar el pensamiento, y hacerlo rápido: he ahí casi toda la premisa para el éxito».

—Trova con trabas. Suena mejor si canta: «Transformar el pensamiento, dile a fragancia».

—«Son muchos poquitos que permitirán a Cuba ir avanzando en pos del desarrollo económico». «A golpe de trabajo y eficiencia podrán ir naciendo las mejores soluciones».

—A golpe de pasar trabajo. No quiero acordarme de lo que se vivió con el colapso de la electricidad. Todavía me estoy cagando en la matriz… energética.

—«De empuje, dificultades por superar, heroísmos y mucho trabajo por hacer todavía habló el jefe de Estado con el pueblo».

—Para empujar son los primeros. Todavía si trabajaran…

—No hables así. Fíjate que en una de las comunidades visitadas (la finca Pratt, en San Antonio de los Baños), sus poco más de seiscientos habitantes viven ahora «otros aires y se han iniciado proyectos como un pequeño horno para la confección de ladrillos que ponen en función de las viviendas del poblado; se arregló el camino de entrada, y se eliminaron más de cien pisos de tierra».

—Una verdadera «enmienda Pratt».

—«Ustedes sigan haciendo cosas y proponiendo ideas; es cierto que no podemos hacer todo lo que quisiéramos, pero no podemos quedarnos detenidos», reflexionó Canel.

—Los que no podemos hacer todo lo que quisiéramos porque nos detienen somos nosotros. Nos mueven el piso y nos hacen tierra.

—En el Pleno Extraordinario del Comité del Partido avileño «se hizo un retrato de la vida de la provincia, la cual experimenta logros palpables en aspectos tan importantes como la vida de la militancia y el ámbito de la producción de alimentos».

—Nótese el orden de los factores: «la vida de la militancia» primero y «el ámbito de la producción de alimentos después».

—En lo alusivo a un asunto tan vital como la jama, el primer secretario provincial afirmó: «La comida de Ciego de Ávila está en nuestros campos».

—«La comida está en los barcos», le hubiera corregido la ministra de Comercio Interior.

—«Un interesante punto de partida en la jornada de análisis fue lo que ha estado sucediendo, para bien, en la Empresa Agropecuaria La Cuba, del municipio de Baraguá. Intercambios incesantes con los productores han propiciado, entre otras realidades, un incremento notable de las producciones».

—Están ciegos… de Ávila. De intercambios incesantes con los productores no depende el incremento notable de las producciones. Con visitas de Canel y todo, la agricultura ha decrecido. Que le pregunten si no al ministro.

—«Ahora, con menos recursos, estamos recuperando cosas. El tema es de trabajo, de inteligencia, de participación colectiva, de uso de la ciencia. Y el tema es también de liderazgo».

—¿Está diciendo que antes no había trabajo, inteligencia, participación colectiva, uso de la ciencia?

—Ni liderazgo. 

—Una crítica velada a Fidel y a Raúl.

—«Hacia el final de la jornada, en la que también se hicieron análisis sobre posibles acciones para reducir el déficit fiscal, Díaz-Canel volvió a un concepto compartido por él en la más reciente jornada de la Asamblea Nacional del Poder Popular: “El momento es sumamente complejo, pero no insuperable: se puede superar, vamos a superarlo”».

—Es decir, vienen tiempos más sumamente complejos.

—El primer secretario del Partido ha pedido «que la gente salga del letargo y comience la actividad, la vida». 

—¿Qué vida?