Como parte de una gira por varios países europeos, Miguel Díaz-Canel visitó al papa Francisco en el Vaticano el 20 de junio de 2023. La reunión entre los mandatarios duró «poco más de 30 minutos», lo suficiente para dar pie a rumores sobre el contenido de las conversaciones. No se sabe con certeza sobre qué hablaron, pero reportes de la prensa independiente sugieren que se trataron temas «sensibles» para el régimen.

En el encuentro, Díaz-Canel le regaló al papa una escultura de bronce y madera titulada «El lector», además de dos libros, uno de Fina García-Marruz y otro de Cintio Vitier. Francisco, por su parte, le obsequió una paloma de bronce con una rama de olivo en el pico. La paloma tiene grabado el mensaje «Sed mensajeros de paz», quizá una «puyita» para quien dio la orden de combate.

Exiliados cubanos criticaron fuertemente la reunión, interpretaron el encuentro como forma de legitimar el Gobierno totalitario de la isla. Decenas de ellos protestaron en Via della Conciliazione, la ancha calle que llega hasta la basílica de San Pedro.

En marzo de 2023, 11 presas políticas cubanas escribieron una carta al papa en la cual le pidieron que intercediera por su libertad. Un mes antes, el cardenal Beniamino Stella visitó Cuba, se reunió con altos funcionarios y expresó que el deseo de su santidad era que liberaran a los detenidos tras las manifestaciones del 11 y 12 de julio de 2021.