Te llegó un audio por Telegram o WhatsApp con información dudosa, leíste algo raro o exagerado, no sabes si un contenido es cierto; es normal. Poder distinguir cuándo es falso o no lleva tiempo y habilidades, incluso para los expertos. Por eso, hoy presentamos DeFacto, un servicio de verificación y datos contra la desinformación en Cuba, cuyo equipo de profesionales chequeará el discurso público por ti.

Convivimos con la información falsa, engañosa, incluso, malintencionada. Nos llega desde diferentes fuentes: institucionales, oficiales, medios de comunicación, redes sociales, y se camufla en nuestros espacios cotidianos para, muchas veces, desarmarnos porque creemos en ella. La mala información apela al desconocimiento, a la incertidumbre y al morbo; hiere a nuestras sociedades; impide el debate público responsable; propaga el odio. La desinformación, en cualquiera de sus variantes, es nociva.

La sobreabundancia informativa, la fuerte polarización política del contexto nacional y las brechas tecnológica entre los distintos sectores sociales demuestran la necesidad de facilitar el acceso a información sustentada en el análisis de hechos y datos. Más allá de intereses y posicionamientos ideológicos, queremos promover la transparencia y contribuir al análisis de los acontecimientos públicos. Disponer de información de calidad no es un lujo, es una necesidad en una sociedad democrática.

Centraremos nuestros esfuerzos en tres líneas fundamentales:

– Contrarrestar la desinformación que circula en espacios informativos y redes sociales.

– Verificar aspectos relevantes del discurso de decisores políticos, medios de comunicación y otros actores que impactan en la vida pública del país.

– Aportar información contextualizada y sustentada en la veracidad y el riguroso análisis de datos para facilitar la deliberación pública.

Los principios que nos guían privilegian los hechos, el equilibrio en relación con el origen de los elementos a chequear y a sus clasificaciones, y el tratamiento igualitario para todas las fuentes de información.

Trabajaremos con una metodología rigurosa, que toma como referente al medio argentino Chequeado, quien nos ha ayudado en este empeño, y que estará disponible para nuestra audiencia, junto a una política de transparencia que abarcará las fuentes consultadas, los recursos con los que trabajamos y los errores que podamos cometer —aunque esperamos sean los menos posibles—.

¿Cómo lo haremos?

Nuestro principal aliado eres tú, que junto a DeFacto Bot nos ayudarás a identificar y frenar las mentiras.

Cada semana en nuestra web y otros espacios del medio podrás encontrar contenido chequeado sobre diversos temas, fundamentalmente, la realidad económica del país, con especial énfasis en el proceso de ordenamiento económico, el mercado de divisas, la producción de alimentos y el emprendimiento privado; la política migratoria cubana; las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos; la legislación nacional; y otras sugerencias hechas por la ciudadanía. Sobre estos asuntos abunda información incompleta, tergiversada o incierta.

También daremos seguimiento al tema de la COVID-19 en el país, un esfuerzo que realizamos en conjunto con Periodismo de Barrio, para desmentir rumores y proveer contenidos de calidad; campo en el que Covide, nuestro chatbot verificador de noticias falsas sobre el coronavirus, ha estado trabajando.

Pregúntale al chatbot COVIDE

Aspiramos a generar una comunidad que ejerza una ciudadanía activa y le interese la fiscalización al poder público, a partir de la desconfianza, incluso hacia nuestro trabajo, y que busque datos e informaciones para la toma de decisiones.

DeFacto Bot ¿qué es y cómo funciona?

DeFacto Bot, nuestro protagonista estrella, es un robot que funciona en Telegram, WhatsApp y Facebook Messenger, programado para Cuba por Datalis, el emprendimiento tecnológico del Colectivo Más Voces. Puedes enviarle un audio, una imagen, una URL o una noticia que desee chequear, o puedes preguntarle por algún tema y te mostrará lo que tiene sobre él.

Cuando le escribes un texto, él busca en una base de datos de chequeos cuál es la información más cercana a partir de una búsqueda semántica y una textual de lo que se le escribe. Si encuentra algo relacionado, te presenta ese resultado principal junto a otros tres secundarios. En caso de que el bot no encuentre ningún elemento, esa información se almacena y se notifica a los editores sobre las búsquedas no encontradas de los usuarios. Cuando se le envía contenido, pasa directamente a ser revisado por el equipo editorial.

«No solo trabaja con acciones, no tiene un flujo predefinido y se puede entrenar. Es sensible a ofensas, se puede saludar, despedirte, pedirle ayuda; es un bot conversacional. Fue desarrollado con una combinación de varias tecnologías: Java Script para la integración con los Messenger, WhatsApp y Telegram, y Python para el procesamiento de los datos almacenados. Tiene un motor de búsqueda textual y una base de datos que almacena los mensajes y los feedback de los usuarios. También, utiliza wit.ai, un componente externo de Facebook para interpretar los mensajes de las personas»; cuenta Abraham Calás, a cargo del desarrollo de DeFacto Bot.

El desarrollo del chatbot y el lanzamiento de esta unidad son resultado de un grant otorgado a 22 organizaciones periodísticas en el mundo  por YouTube y la International Fact-checking Network (IFCN) de Poynter y de la experiencia acumulada del trabajo con Covide bot, pero esta vez expandiendo su campo de acción.

Aunque las fake news van siempre un paso por delante, nosotros, muy cerca de ellas, no les daremos respiro. Contamos contigo para ponerle freno a la mentira, venga de donde venga. Envíanos hoy la primera información que te gustaría que chequeáramos.

Puedes acceder desde:

Telegram (@DeFactoCubaBot)

WhatsApp (+5351002713)

Facebook Messenger  (@DeFactoCubaBot)