—Regresan las bicicletas treinta años después.

—¿Qué te hace pensar en ello?

—Leo que «estudiantes habaneros de diferentes instituciones de la enseñanza mostraron su irrevocable apoyo a la continuidad de la Revolución cubana al protagonizar una bicicletada antimperialista».

—Aquí no se inventa nada que no sea en respuesta a las trastadas de los enemigos del norte. Ten por seguro que primero hubo una bicicletada imperialista frente a la Casa Blanca.

—No me preocupa eso, sino que la de aquí haya partido de La Chorrera. Parece clara alusión a que en cualquier momento los chinos nos envían otra vez y a chorro las Forever.

—No creo. Imagino que Cuba todavía les deba por la compra masiva que se hizo en los noventa.

—El gigante asiático tiene que darse cuenta de que es hora ya de variar su política hacia Cuba. Cada vez que oigo en el Noticiero que las Yutong están de gomas caídas por las restricciones impuestas a nuestra economía y constato que el transporte urbano en La Habana prácticamente no existe, me dan ganas de pararme con un cartel a protestar contra el bloqueo… chino.

—A cualquiera que oiga el NTV le dan ganas de salir a dar una vuelta en bici. Esos jóvenes de la bicicletada se inspiraron en la antológica frase que pronunció Pavel Otero en el estelar de las ocho de la noche: «Las dificultades de la vida se enfrentan con espíritu deportivo».

—Debían agregársela al spot que pone la ONAT y que solo un postgrado de Semiótica permitiría atender. No sé qué coño tiene que ver el pago de impuestos con eso de que «Por cada motivo que energiza tu vida, marca tu valor».

—El valor de la bicicletada antimperialista es simbólico. Fíjate que la convocaron la FEEM y la FEU para «demostrar la fortaleza ideológica de una generación que continúa el camino de independencia y soberanía con el reinicio de la Guerra necesaria el 24 de febrero de 1895».

—Pobrecitos los mambises si, a falta de transporte equino, tuvieran hoy que sustituirlo por bicis para invadir Occidente.

—No hará falta: Canel acaba de hacerlo. Dice que era importante para él, «en lo emocional, en lo sentimental, visitar el monumento que recuerda la culminación de aquella gesta heroica que comandó Maceo durante noventa días de sacrificio y carga al machete».

—Igual de heroicas son las setenta jornadas de sacrificio que llevamos los cubanos en el 2025 entre apagones, falta de gas, escasez de pan…

—…y sin carga al machete.

—Qué carga va a haber si ni mochas hay. No sé de dónde sacaron la réplica de la de Maceo que le entregaron como talismán a los bicicleteros en el parque del mismo nombre.

—Al Titán le hubiera interesado ver en Mantua «la inventiva de un cuentapropista que recupera las hornillas eléctricas de las cocinas entregadas en la llamada Revolución Energética, utilizando dos de las espirales de las resistencias, fundidas en una base de aleación de calamina, la cual derrite en una forja que consume carbón vegetal». Gastan menos energía que las hornillas originales. El tipo ha fabricado ya más de seiscientos dispositivos. ¿Imaginas las posibilidades que se abren para devolverles a los chinos toda la mierda que nos mandan?

—Se las exportaríamos junto a las «bicicletas de bambú sin pedales que llamaron de inmediato la atención de quienes acudieron a la Feria Internacional del Deporte en la Ciudad Deportiva». Dice el Tribuna que «las uniones del cuadro están hechas con una mezcla de resina, saco de yute y fibra de vidrio, entre otros componentes que le dan la rapidez requerida».

—La rapidez requerida para que te destimbales.

—Ofrecen como dato curioso que «de las veintiocho especies de bambú existentes en Cuba, solo dos son aptas para fabricar estas bicicletas, y se encuentran en el Jardín Botánico de Cienfuegos».

—Que se destimbale además el Jardín Botánico de Cienfuegos. El resultado pudiera ser venderles a los chinos un lote grande de bicicletas para comprar el bambú que hará falta cuando se agote el de la Perla del Sur.

—Yo les dejaría esas bicis a los mambises, para cuando Canel los encamine en invasión desde el Oriente en «visitas de enseñanza y aprendizaje». Sería hermoso aderezar el spot de la ONAT con la imagen de un armatoste de los que fabrica Velo Cuba. Después de la frase «Por cada motivo que energiza tu vida, marca tu valor», entraría música y patriotismo de Arnaldo y su Talismán interpretando: «¡Bambú se fue a la guerra…!».