—Parece que los dirigentes han tomado conciencia de lo feo que se ve, ante el avance de la materia adiposa, exhibir en televisión camisas y botones a punto del estruendo.

—No veo mal que muestren su redonda complexión, algún logro tienen que exhibir. 

—Ellos sí lo ven pésimo. Por eso se han propuesto hacer ejercicios.

—Abdominales.

—No exactamente. A este que acaba de concluir lo han nombrado «Ejercicio nacional de prevención y enfrentamiento al delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales».

—Un honesto enfrentamiento a la corrupción pudiera hacer más contra las barrigas que una rueda abdominal o una electroestimulación localizada.

—«Se trata de un ejercicio integral, con participación y control popular, que fortalece la unidad de nuestro pueblo y que está orientado sobre todo a enfrentar manifestaciones de corrupción, delito, ilegalidades…». La corrupción la ponen en primer lugar.

—¿Se ha enumerado la cantidad de mansiones de Siboney que fueron visitadas?

—Todavía se procesa la información, pero quién quita que el puesto de mando lo hayan situado en esa zona: el ejercicio fue «dirigido a nivel nacional, provincial y municipal por el Partido, el Gobierno y el Ministerio del Interior».

—Un trío que hace y deshace sin que ocurra absolutamente nada.

—No hay que adelantarse a los acontecimientos. Todavía se procesa la información para hacer más adelante un análisis público y detallado.

—Si es como el que ha hecho la Asamblea Nacional…

—No sé el que viste tú, pero Lazo lo calificó como «interesantísima discusión e intercambio».

—¿Puede haber «discusión» e «intercambio» en un lugar donde la intervención más aplaudida aludió a que las estructuras de inspección son aún débiles y que la solución está en hacer contingentes con estudiantes de Técnico Medio y de Contabilidad y Finanzas para «ir fortaleciendo y completando las estructuras del “Estado Mayor de la Economía”?». Qué, ¿también la economía se dirige desde un búnker?

—No me extraña. En asuntos económicos nunca han puesto los pies sobre la tierra.

—Gracias a esa intervención me enteré de que se implantan guardias en las bodegas,

—Para proteger qué. 

—Hasta les ponen trampa química. ¿Tienes idea de qué es una «trampa química»?

—Debe ser la botella de ron que se oferta por fin de año.

—Y que ya le dieron a Raúl. A golpe de gritos y de puñetazo sobre la mesa elogió a ese diputado e hizo uno de sus tantos llamados.

—Lazo no aplicó su autoridad. Raúl «sí puede».

—No me hagas recordarlo. Qué momento. ¡Tú sabes el carácter que se manda el presidente de la Asamblea Nacional!…

—Lo demostró cuando llamó a la cordura respecto a las intervenciones de los diputados. Advirtió que solo le daría tres minutos a cada uno. La que vino atrás se cogió nueve.

—¿Qué espera uno de un tipo que apunta que «el orden, la disciplina, la lucha contra el delito, la defensa de los valores es el alma de la Revolución»? Pues que le diga: «¡Diputado: aquí se pide la palabra, no se vocifera! ¡Y se le aplica responsabilidad material a quien rompa la propiedad del Estado!».

—¿Tú estás loco? Capaz de que, tras decirle eso, del susto lo haga bajar del estribo. Además, ¿qué puede importar una mesa más u otra menos? El propio Lazo ha dejado claro que «eso produce daños a la economía, pero también en lo ideológico, que es la base fundamental de todo». Marx y Engels no pensaban así, argumentaban que las condiciones materiales de la vida de los seres humanos han determinado siempre su forma de vivir y de pensar.

—Y la forma de su abdomen.

—Si tú dices que lo ideológico es «la base fundamental de todo», tienes que hacerte medianamente creíble. No puedes permitir que en diciembre de 2023, tras pomposa reinauguración de la acería eléctrica de la Empresa Siderúrgica José Martí por crédito gubernamental ruso, se declare que «Las inversiones que se desarrollan en Antillana y en Acinox Las Tunas contribuirán a que Cuba recupere su capacidad productiva de acero», para que después venga el ministro de Economía y declare en igual fecha de 2024, sin explicación adicional, que «la producción de acero fue nula».

—Por cierto, ya que hablamos de ministros de Economía: ¿sabes si el «Ejercicio nacional de prevención y enfrentamiento al delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales» incluyó acabar de informar lo que pasó y pasará con Gil?

—No creo. Para ser incluido en el Ejercicio y en su Consolidación había que asistir a los repasos.