Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez inició una gira internacional a Argelia, Turquía, China y Rusia el 17 de noviembre de 2022. 

El primer secretario del Partido Comunista anunció desde su cuenta de Twitter que el objetivo fundamental de la gira era abordar temas esenciales para el país, relacionados «fundamentalmente con el sector energético».

Cuba y los cubanos enfrentan una crisis generalizada que se ha profundizado por el déficit de generación eléctrica. De ahí que no sea una sorpresa que el mandatario cubano pretenda acercarse a quienes en el pasado han servido como alternativas para la obtención de materias primas o equipos imprescindibles para evitar los apagones que han generado descontento popular creciente y han lanzado ―entre otros factores― a cientos de cubanos a las calles en los últimos meses. 

La industria eléctrica cubana sigue teniendo como matriz energética fundamental el petróleo. Por eso no es casual que Díaz-Canel acuda a dos de sus principales suministradores de hidrocarburos, Argelia y Rusia. También a quien le ha ofrecido plantas de generación móvil, Turquía. Y a su segundo socio comercial y aliado político, China.

ARGELIA 

Desde 2016 con la profundización de la crisis de la industria petrolera venezolana, comenzaron a decrecer los volúmenes de crudo que Cuba recibía de su principal aliado. La crisis venezolana llevó incluso a que en 2018 Venezuela ―ante la imposibilidad de cumplir con petróleo propio sus compromisos con las autoridades cubanas― comprara crudo en el mercado internacional para enviarlo a Cuba.

En ese año (2018) viajó a La Habana una delegación gubernamental argelina y suscribió un convenio de colaboración con funcionarios cubanos. El convenio venía a ser un paliativo a la pérdida de suministro de petróleo venezolano y contemplaba el envío de hidrocarburos desde Argelia hacia Cuba durante tres años. Asimismo, estableció el aumento de la colaboración en materia de salud entre ambos países. Cuba ampliaría el número de médicos que laboraba en territorio argelino. 

El convenio de 2018 fue un claro quid pro quo para ambos regímenes. Cuba estaba necesitada de petróleo y el Gobierno argelino de médicos. Abdelaziz Bouteflika, un viejo amigo de los Castro, todavía gobernaba Argelia. En el momento de firmarse el convenio, el Gobierno de Bouteflika estaba negociando con el Colectivo Autónomo de Médicos Residentes (CAMRA, por sus siglas en francés) que durante meses habían luchado por mejoras salariales y contra el servicio social obligatorio y habían sido reprimidos por fuerzas estatales.

Bouteflika gobernó el país africano por dos décadas desde 1999 ―cuando concluyó la guerra civil― hasta 2019 cuando intentó ―anciano, enfermo, con problemas de movilidad y habla― reelegirse para un quinto mandato y se desataron multitudinarias protestas sociales que lo obligaron a abandonar la política. Fue un aliado incondicional de los Castro. De ahí que no resultara sorpresivo que socorriera a su principal socio estratégico en Latinoamérica y obtuviese algo a cambio para controlar una crisis. 

Bouteflika no es presidente de Argelia pero el sistema no ha cambiado. Los militares siguen teniendo un papel preponderante en la política del país aunque revestido de un halo de constitucionalismo y elecciones que muchos descreen. En su reporte sobre la Democracia en el mundo de 2022, V-Dem considera que Argelia es una autocracia electoral y la colocan en el puesto 135 de 179 ―la calidad se evalúa en orden descendente― en su índice de democracia. Las relaciones entre Argelia y Cuba ―considerada como un autoritarismo cerrado y ubicada en el puesto 159 del índice de V-Dem― han sido muy estrechas desde antes de la independencia de ese país de Francia en 1962. 

¿Cuáles son las regulaciones de los médicos cubanos para viajar al exterior?

En los últimos meses han circulado varias desinformaciones sobre nuevas regulaciones de viaje de los médicos cubanos desmentidas por el Ministerio de Salud Pública. Sin embargo, este asunto es propicio para desinformaciones por su opacidad y complejidad.

Abdelmadjid Tebboune, presidente de Argelia desde diciembre de 2019 y quien recibió a Díaz-Canel el 17 de noviembre de 2022, tiene una historia de más de 40 años en la política argelina. Tebboune ostenta simultáneamente el cargo de presidente y de ministro de Defensa del país. 

En una conferencia de prensa durante la visita de Díaz-Canel, Tebboune expresó que Argelia tiene un deber «hacia la hermana República de Cuba» y consideró que los lazos históricos entre Cuba y Argelia son distintivos. Los lazos históricos se remontan a junio de 1961 cuando Cuba reconoció al Gobierno Provisional Revolucionario de Argelia como legítimo representante de la República Argelina y se convirtió en el primer país del hemisferio occidental en formalizar el reconocimiento. 

En diciembre de ese año (1961) Fidel Castro envió un cargamento de armas al Ejército de Liberación Nacional de Argelia. Lo hizo a través de un periodista argentino radicado en Cuba, Jorge Ricardo Masetti, y de Ángel Martínez, un comandante republicano de la Guerra Civil Española que había participado con los soviéticos en la Gran Guerra Patria, donde alcanzó el grado de coronel y era en ese momento asesor de las Fuerzas Armadas de Cuba.

Los vínculos históricos entre ambos regímenes han facilitado el mantenimiento durante décadas de una alianza estratégica entre Cuba y Argelia. Una alianza que no parece haberse quebrado a pesar de los cambios en los liderazgos, toda vez que las esencias de ambos regímenes permanecen intactas. 

A la alianza autoritaria es a la que ha apelado Díaz-Canel para obtener como principales resultados nuevos acuerdos que le otorgan un respiro temporal al Gobierno de La Habana. En sus declaraciones durante la visita de Díaz-Canel, Tebboune aseguró también que ambos Gobiernos habían acordado producir de forma conjunta medicinas, sueros y vacunas relacionadas con enfermedades africanas y no africanas. 

Pero el acuerdo más trascendental derivado de la visita de Díaz-Canel a Argelia es la suspensión del pago de la deuda cubana con ese país y la cancelación de los intereses acumulados por ella. Las relaciones entre ambos autoritarismos han permitido que todas las negociaciones de este tipo se manejen en el marco de la confidencialidad. 

No obstante, en el caso de Argelia algunos detalles han sido ofrecidos y a partir de estos se ha confirmado, por ejemplo, que el convenio de 2018 no era exactamente ―como algunos afirmaron― de petróleo por médicos. El convenio implicaba la comercialización de petróleo en una vía y de servicios médicos en otra.

En mayo de 2020 el diario 14ymedio publicó un reportaje en el que analizaba el convenio de servicios médicos que fue publicado por el Gobierno argelino en el Journal Officiel (equivalente de la Gaceta Oficial de Cuba). El convenio deja claro que el envío desde Cuba de 890 profesionales sanitarios a Argelia estaría garantizado por el pago de 65 millones de euros anuales. 

Diaz Canel y los apagones ¿JUSTIFICADOS?

¿Quién debería decidir cuándo, cuánto y cómo invertir en las reparaciones y mantenimientos de las termoeléctricas? ¿Dónde está el presupuesto que anunciaron hace años para mejorar el Sistema Electroenergético Nacional en Cuba?

Uno de los elementos más ilustrativos del convenio publicado por los argelinos es una cláusula de confidencialidad que «compromete a las partes a no difundir, divulgar o hacer pública ninguna información que hayan intercambiado o conozcan como fruto del acuerdo a menos que sea de dominio público, requerida por la ley o por pacto entre las partes».

La falta de transparencia o «confidencialidad pactada» es la misma que impide hoy conocer a ciencia cierta el monto de la deuda suspendida y de los intereses condonados. La opacidad de doble vía ha sido una de las ganancias de las alianzas cubanas con socios autoritarios. Pero incluso en ese marco queda claro que las alianzas con socios de este tipo no implican regalos sustanciales o altruismos desmedidos.

El petróleo que se recibió de Argelia tenía un costo, como mismo lo tenían los servicios médicos exportados por Cuba. Al parecer Argelia ha pagado sus compromisos con Cuba porque la colaboración médica se ha mantenido. Pero los cubanos desconocen cuánto ha pagado Cuba a los médicos que ha enviado al país africano y por los que recibe 73 mil euros anuales. También desconocen cuánto debe Cuba a Argelia por el petróleo u otros servicios que le han proveído a las autoridades cubanas.  

Pero lo que sí parece ser un hecho es que Cuba ha incumplido con sus obligaciones para con Argelia. Está constatado que la Administración cubana mantiene una deuda con Argelia y que ha sido suspendida recientemente por el Gobierno de ese país. También está probado que se habían acumulado intereses (que se producen por la demora en el pago) que han sido igualmente cancelados. 

De las declaraciones de Tebboune durante la visita de Díaz-Canel también puede colegirse que los impagos cubanos y el fin del término del convenio de 2018 (tres años), suspendió el suministro de petróleo a Cuba desde Argelia. De acuerdo con el presidente argelino, después de la firma del nuevo convenio negociado durante la visita de Miguel Díaz-Canel, «Argelia [restablecerá] el suministro de hidrocarburos a Cuba para que pueda reactivar sus plantas y combatir los actuales cortes de electricidad».

El «restablecimiento» implica una suspensión o cancelación previa del suministro. Una cancelación que al parecer será reiniciada en los próximos días. Sin embargo, queda a los cubanos la duda y el derecho a conocer a cambio de qué.

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