Cuando llega diciembre los precios suben. Al menos así ha sido históricamente en Cuba, y los que residimos en el país estamos adaptados a ello. Por eso, cada año, resistencia creativa mediante, nos preparamos para enfrentar el «asalto» a los bolsillos: al propio y al de familiares y amigos en el exterior.

2022 no fue la excepción: la carne, los cigarros, el ron, el aceite, el huevo, el pan subieron sus precios; sobre todo, porque aumentó su demanda y con ello su escasez. Sin embargo, las divisas reales y la postiza (la MLC) han disminuido su precio respecto al peso cubano (CUP) en el mercado informal. En pocas palabras, la tasa de cambio informal (TCI) se ha reducido. ¿Por qué? 

La explicación más sencilla puede estar en que no hay explicación; es decir, la reducción de la TCI a finales de 2022 se debió a las fluctuaciones cíclicas y «naturales» del mercado cambiario informal. Por tanto, el fenómeno en cuestión no merece mucha más importancia.

No obstante, la hipótesis no impide buscar y valorar otras.

Turistas y aguinaldo

Una primera aproximación convencional y monetarista diría que la TCI ha bajado porque, mientras la demanda de divisas se ha mantenido constante, se ha dado un aumento de su oferta. Lo que podría deberse esencialmente a la combinación de:

1.             un crecimiento de las remesas en diciembre

2.             un aumento del arribo de turistas en diciembre

Respecto al aumento de las remesas, no hay datos públicos, así como tampoco otras señales, para tener la seguridad de que esto sea así. Lo que no impide que tenga sentido la idea de que en fin de año aumenta el envío de remesas de familiares y amigos en el exterior. Si la empresa estatal socialista no entrega un aguinaldo revolucionario, pues que venga de afuera.

Luego, cabe preguntarse si es suficiente el monto del «aguinaldo» recibido en Cuba en MLC y divisas como para impulsar una reducción de la TCI. Aunque no hay razones para suponer que las ayudas de fin de año representen un salto tan grande en su crecimiento.

En cuanto al turismo, si noviembre tuvo 178 851 arribos, y ese mes estaba insertado en una tendencia al alza, es de esperarse que en diciembre hayan llegado más turistas y, por tanto, más divisas.

También cabe preguntarse si la magnitud del aumento del turismo en diciembre fue tal como para aportar un monto de divisas que impulse una caída de la TCI. A pesar de la tendencia mencionada, no hay razones para suponer que los arribos de fin de año representen un salto tan grande en su crecimiento.

La libreta no sé, pero ahora fue que se encontró

Diciembre es el mes del puerco, la cerveza, el flan, el tostón, el chicharrón… o solía serlo. El cubano en la isla intenta continuar sus tradiciones como puede.

De lo necesario para el fin de año —la cerveza, el ron, hasta el lomo de puerco limpio, por solo mencionar ejemplos—, durante todo 2022 se conseguía casi solo con MLC, aunque no ocurre así con la mayoría de los productos del agro.

Pero la novedad del cierre de 2022, segundo año después del Ordenamiento, es que, al mismo tiempo que las tiendas en MLC apenas tenían ofertas, el Gobierno vendió puerco, pollo y cerveza en CUP, en cantidades significativas. Para ello, las autoridades implementaron un sistema de ventas al estilo libreta de abastecimiento. Tiendas estatales ofertaron en CUP picadillo, detergente, pollo, aceite y cerveza, además del mencionado «mamífero nacional» en carnicerías y establecimientos similares. ¡Qué detalle para el cierre de año!

Los núcleos familiares estuvieron enfrascados (de manera individual o combinada) en pagar entre 7 y 12 mil CUP por pieza de puerco; poco más de 3 mil CUP por caja de cerveza; y la jamonada y ofertas particulares de cada territorio. Además, no había mucho que comprar en las tiendas en MLC.

Como resultado, los ciudadanos no emplearon todo ese dinero en CUP en comprar MLC para adquirir los mismos bienes. Por ejemplo, mil piezas de puerco de 7 mil CUP vendidas en las carnicerías estatales representan 7 millones de CUP que no fueron al mercado informal a comprar MLC para acceder a los pedazos de lomo limpio o pierna que ofertan, también, las tiendas en la moneda virtual.

Es decir, como consecuencia de que el Gobierno aumentara la oferta de bienes en CUP para el fin de año, combinado con una clara escasez de oferta en MLC, ocurrió una reducción de la demanda de MLC. Lo que pudo ser un factor en la caída discreta de la TCI.

Si baja la tasa de cambio, ¿por qué no disminuyen los precios?

En Cuba se ha normalizado la idea de que cuando sube la tasa de cambio informal de divisas el nivel de precios aumenta también. De ahí que sea lógico suponer que, del mismo modo, los precios disminuyen cuando la tasa de cambio informal baja. ¿Ocurre así?

El tamaño importa

En cuanto a si el proceso tuvo dimensiones como para influir en el precio de las divisas, existen algunas señales.

Las ventas en CUP de fin de año han sido un fenómeno cuyo impacto es visible socialmente (las largas colas) y ha tenido una huella perceptible en la economía del hogar de la mayoría de los cubanos (al menos los que tienen libreta). Cada cual puede comprobarlo con las personas que tiene a su alrededor, porque de una forma u otra impactó claramente sobre el consumo de bienes.

Sin embargo, no ocurre así con el envío de remesas y el aumento de la oferta de divisas. Muchas personas que conocemos compraron su pollo, picadillo, aceite o el cerdo, pero no siempre recibieron remesas o un gran aumento de estas. Tampoco se ha notado que haya muchas más personas vendiendo divisas, como si la oferta hubiera aumentado. Ello da razones para apostar por las ventas en CUP de fin de año como una de las causas de la disminución de la TCI. De hecho, ha sido señalado por varios economistas que una de las vías para reducir el precio de las divisas es aumentar la venta de bienes, con abundancia y calidad, en CUP.

Viajes y expectativas

Sin excluir lo anterior, otras condiciones pueden también incidir hoy en la caída de la TCI. Una de ellas son las expectativas de los agentes que intervienen en el mercado cambiario. Por ejemplo, los dueños de las «cadecas privadas» de cada barrio (individuos que se dedican a comprar y vender divisas), así como los negocios privados que constantemente tienen que adquirirlas, están entre los actores determinantes del mercado cambiario informal cubano. Cabe la posibilidad de que, a su manera, estos hayan anticipado el comportamiento o el efecto de los factores mencionados (aumento del turismo, aumento de remesas y aumento ventas de bienes en CUP) o simplemente reaccionaran ante ellos. En ese caso, dichos actores constituyen otra fuerza que interviene como catalizador o ralentizador de la tendencia del comportamiento de la TC.

Por otro lado, se encuentra el factor demográfico y la ola migratoria. Aunque el tema merece un análisis independiente, las formas y fuentes de financiamiento de las migraciones dan algunas señales.

Por ejemplo, una manera de costear el recorrido entre Nicaragua y la frontera sur estadounidense es a través de préstamos y endeudamiento con familiares y amigos en el exterior. Otra es la venta de bienes (casas, carros), los cuales han tenido una caída nada despreciable de sus precios. Por tanto, sus compradores necesitan menos divisas para pagar, lo que provoca la disminución de la demanda de las monedas en el mercado informal.

Es válido señalar que el conocimiento de la magnitud de estos factores queda en lo especulativo.

Conclusiones

Comprender con exactitud las razones del movimiento del mercado informal cubano resulta difícil por diversas razones. Pero si se quiere encontrar una explicación a la caída del precio en diciembre, sobre todo en la segunda quincena del mes, primero debe tenerse en cuenta la posibilidad de que haya muchos factores incidiendo a la vez; segundo, uno de ellos, quizá el más fácil de verificar y de impacto perceptible, ha sido la venta en CUP y de manera normada de carnes, bebidas y otros bienes de la preferencia y necesidad de los cubanos.

Queda preguntarse si las ventas se podrán sostener en el tiempo y aumentar su magnitud para reducir más la TCI. Pero ese es otro tema, aunque la respuesta es evidente.