En un movimiento sorpresa, la Administración liderada por Joe Biden quitó a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo. Según Martí Noticias, a cambio, el Gobierno cubano prometió liberar a presos políticos.
La mayoría de los presos políticos del país están en la cárcel desde las masivas protestas del 11 de julio de 2021. Martí Noticias afirmó que el proceso de negociación ha sido llevado por ambos países en conjunto con el Vaticano. El Estado de la Ciudad del Vaticano también colaboró en las negociaciones por la liberación de los prisioneros de la Primavera Negra y en el llamado deshielo que empezó el 17 de diciembre de 2014.
El cardenal de La Habana, Juan de la Caridad Rodríguez, dijo a Martí Noticias desconocer sobre si iban a liberar o no a los presos políticos.
En una nota de prensa, el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) cubano anunció que el Estado liberaría gradualmente a 553 personas «sancionadas por delitos diversos». No sabemos aún qué delitos tomaron en cuenta ni de qué personas se tratan.
Un alto funcionario de la Administración Biden informó en una llamada con periodistas que la decisión fue tomada de manera unilateral y estuvo vinculada con un compromiso del Gobierno cubano con la Iglesia católica para la liberación de los presos políticos. Según el funcionario, la Iglesia católica actuó como mediadora en el proceso y se espera que próximamente se anuncie la liberación de un «número significativo» de esos detenidos.
El funcionario también dijo que su Administración suspendería por seis meses el Título III de la Ley Helms-Burton y eliminaría otra lista de entidades restringidas de hacer negocios con Estados Unidos. Sobre esa parte del acuerdo no hay más detalles.
No queda claro cuánto pueden durar las medidas, pues al Gobierno demócrata le queda menos de una semana en la Casa Blanca. El presidente entrante, Donald Trump, prometió mano dura contra el régimen que gobierna la isla desde 1959. La propuesta de Trump para Secretario de Estado es el cubanoamericano Marco Rubio, uno de los mayores partidarios de esa mano dura.
La noticia sorprendió a muchos. En diciembre de 2024, el actual Secretario de Estado, Antony Blinken, le dijo a la congresista de origen cubano María Elvira Salazar que no habría novedades con respecto a Cuba hasta el 20 de enero de 2025. «No anticipo ningún cambio», respondió el funcionario.
Cuba fue incluida por primera vez en el listado en 1982. La Administración republicana de Ronald Reagan acusó al Gobierno de Fidel Castro de apoyar a grupos armados y terroristas en América Latina y otras partes del mundo. En 2015, el expresidente Barack Obama sacó por primera vez a la isla de la lista negra. En los últimos días de su primera Administración, en 2021, Trump volvió a incluirla.
¿Cómo afecta la lista a los cubanos?
La inclusión afecta tanto al régimen como a una parte de los cubanos en el exterior. Las sanciones incluyen la prohibición de ayuda económica y restricciones en la entrada a la isla de artículos de uso militar y civil. También se dificulta la realización de préstamos internacionales del Banco Mundial y del FMI al Estado cubano, así como limitaciones en programas de colaboración internacional y negocios con entidades estadounidenses.
En lo referente a particulares, las personas con doble nacionalidad, pero de origen cubano, no pueden acceder a la visa electrónica ESTA, que facilita los trámites para entrar en Estados Unidos. También los extranjeros que hayan estado recientemente en Cuba se ven afectados por la medida.
Además, tienen restricciones para operar con cuentas de bancos o pasarelas de pago, como Wise o PayPal. Las cuentas de los clientes cubanos pueden ser bloqueadas debido a su origen.
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