El poder en Cuba hace movimientos. En los cuatro primeros meses de 2024 cambiaron tres ministros, cuatro viceministros, dos titulares de organizaciones nacionales que son parte del Consejo de Estado y siete de los 15 secretarios provinciales del Partido Comunista de Cuba (PCC) —cargo de mayor autoridad local—. También convocaron elecciones para gobernadores y vicegobernadores en cuatro territorios del país. Los movimientos fueron anunciados a cuentagotas y como quien no quiere hacer ruido.
En la mayoría de los casos, los cambios fueron acompañados de felicitaciones y el poder los presentó como parte de «la política de renovación de cuadros». Muchos «pasarán a ocupar otras funciones», según informaron escuetas notas oficiales que poco revelan sobre las estrategias internas del Partido y del Gobierno.
Más que ante una ola de destituciones se está frente a un ajedrez político que reacomoda cargos, nombres y funciones en sus estructuras intermedias. Pudiera ser una respuesta política a la actual crisis que vive el país, con la idea de aparentar cambios que a la ciudadanía les parezcan favorables. Los movimientos, además, pueden ser un ejercicio de formación y entrenamiento para algunos cuadros que necesitan probarse en distintos escenarios de cara a futuras renovaciones. Por supuesto, también hubo sacrificados.
Primeros cambios: el Gobierno
Los primeros anuncios se hicieron en enero de 2024 en los Ministerios de Cultura (Mincult) y del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (Mincex).
Fueron destituidos de viceministros de Cultura, Fernando Rojas Gutiérrez —de larga data en el cargo y una de las figuras oficiales protagónicas en los hechos del 27 de noviembre (27N)— y Kenelma Carvajal Pérez. Ocuparon sus puestos Lizette Martínez Luzardo, hasta ese momento directora general de Políticas Culturales, y Lillitsy Hernández Oliva, quien era presidenta del Consejo Nacional de las Artes Escénicas.
En el Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión extranjera, la entonces vice ministra primera del organismo, Ana Teresita González Fraga, fue sustituida por Oscar Pérez-Oliva Fraga. El otro viceministro destituido fue Roberto López Hernández. En su lugar fue nombrado Carlos Luis Jorge Méndez, quien era el director general de Inversión Extranjera en el Mincex.
El anuncio más inesperado llegó el 2 de febrero con la destitución del vice primer ministro y ministro de Economía y Planificación Alejandro Gil, quien encabezaba la reforma económica en el país. El comunicado oficial dijo que Gil, de 60 años, quedaba liberado «de sus responsabilidades». Sin embargo, un mes después las autoridades comunicaron que el exministro era investigado por el ministerio del Interior y que se encontraba retenido. Díaz-Canel, en una nota oficial, confirmó que Gil se estaba bajo investigación «por graves errores».
También el 2 de febrero, el Gobierno cubano también separó de sus puestos a Elba Rosa Pérez Montoya, entonces ministra de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente (Citma), y a Manuel Santiago Sobrino Martínez, antiguo ministro de la Industria Alimentaria. Las destituciones fueron noticias menos rimbombantes.
Designaron ministro de Economía a Joaquín Alonso Vázquez —quien era presidente del Banco Central de Cuba—; ministro del Citma a Eduardo Martínez Díaz —hasta ese momento presidente del Grupo Empresarial BioCubaFarma—; y ministro de la Industria Alimentaria a Alberto López Díaz —quien era gobernador de Villa Clara—.
El PCC mueve al menos a la mitad de sus secretarios provinciales
Las recientes destituciones y cambios en las cúpulas partidistas provinciales llaman la atención por su alcance. La frecuencia demuestra que no se trata de un hecho aislado, sino de una estrategia de la organización. Ocurren a solicitud del Buró político y son anunciadas en los plenos que se realizan en los territorios. Roberto Morales Ojeda, miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central, es el portador del mal augurio y quien preside las reuniones.
Sin embargo, aunque la noticia que trasciende suele ser la destitución, en algunos casos los «destituidos» se mueven hacia cargos, instancias o posiciones superiores. Algunas de ellas anunciadas, otras no.
José Ramón Monteagudo, quien era el primer secretario en Santiago de Cuba desde octubre de 2021 fue sustituido por Beatriz Johnson Urrutia, miembro del Comité Central del PCC y del Consejo de Estado y quien era la gobernadora en el territorio hasta el primero de febrero.
Monteagudo recibió reconocimientos por su trabajo y regresó al Comité Central. En la práctica, se podría considerar un ascenso, aunque su nombramiento al frente de la provincia oriental fue una medida temporal.
En Cienfuegos, el 20 de febrero, se destituyó a Marydé Fernández López y el puesto de primer secretario pasó a Armando Carranza Valladares, quien formaba parte del equipo del territorio.
En Ciego de Ávila, el 15 de marzo, se anunció el cambio del primer secretario del PCC Liván Izquierdo Alonso por Julio Heriberto Gómez Casanova. Se trató de un claro ascenso de ambos porque Gómez Casanova pasó de dirigir el municipio de Ciego de Ávila a la provincia y Livan Izquierdo pasó a regir la capital del país.
El 5 de abril, en La Habana, las autoridades anunciaron que Luis Antonio Torres Iríbar asumiría «nuevas tareas». Se trató del único movimiento validado con la presencia de Miguel Díaz-Canel en el pleno.
En Matanzas se «liberó» a Suselys Morfa González de primera secretaria el 31 de marzo y su cargo fue ocupado por Mario Felipe Sabines Lorenzo, quien era el gobernador. A Suselys se le asignarán otras responsabilidades en el Comité Central del Partido, según la nota oficial. Aunque no se ha hecho público su nuevo cargo, varias personas —entre ellas Lis Cuesta, esposa del presidente— la felicitaron y le desearon éxitos.
El 19 de abril en Las Tunas fue nombrado Walter Simón Noris —miembro del buró ejecutivo del Comité Provincial del Partido en Camagüey— sustituto de Manuel René Pérez Gallego. Aunque se dijo que Pérez Gallego asumiría otras responsabilidades, aún no son públicas.
Un día después, en Holguín, se nombró a Joel Queipo Ruiz primer secretario en sustitución de Ernesto Santiesteban Velázquez, quien —según igual nota— pasaría a ocupar responsabilidades en la estructura auxiliar del Comité Central.
Los movimientos también han ocurrido en algunos municipios. Resaltó en la prensa la destitución de la primera secretaria del PCC en Mantua, Pinar del Río, Liusmara Rodríguez Soriano ; en Manatí, Las Tunas, la «liberación por renovación» de Carlos Alberto Cabrera González; y la destitución de Antonio Miguel Suárez Salazar en Remedios, Sancti Spíritus. También en esta provincia, en Trinidad, se nombró a William Rodríguez Turiño como primer secretario y quien se desempeñaba como tal, Denis Díaz Peláez, paso al comité provincial.
En el pleno del Comité Central celebrado en diciembre de 2023, el Partido acordó posponer por segunda vez la Segunda Conferencia Nacional —retrasada de octubre al primer trimestre de 2024—. El primer retraso fue para «contar con más tiempo para procesar e incorporar las propuestas a las acciones del PCC para afrontar el embargo comercial de Estados Unidos y la guerra no convencional» y el segundo «para ser consecuentes con la situación económica del país».
Es de esperar que en los próximos días se conozca el destino de algunas de las figuras mencionadas; sea si pasan a ocupar cargos en otras provincias o si asumen posiciones en segunda línea en organizaciones o en oficinas centrales del Partido. Ninguno de los funcionarios partidistas hasta ahora removidos de sus funciones perdió la condición de diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Gobernadores y otros cambios
Los cambios en las estructuras del Partido han implicado que algunas figuras que estaban en la segunda posición en las provincias pasaran a ocupar roles protagónicos —como sucedió en Santiago de Cuba y Matanzas—. Los nuevos gobernadores deben ser electos por las Asambleas Municipales a propuesta del presidente.
En Villa Clara y en Cienfuegos habrá elecciones el 4 de mayo de 2024. En el primer caso, quedó vacante el puesto porque el gobernador villaclareño pasó a ser ministro de la Industria Alimentaria y el segundo, debido a la reciente noticia de la renuncia del gobernador cienfueguero.
El 24 de abril, Alexandre Corona Quintero renunció al cargo de gobernador tras reconocer «errores cometidos en el ejercicio de su responsabilidad». El hecho, diferente al resto de las destituciones, dejó a Cienfuegos sin dirigentes del máximo nivel.
Los gobernadores habían sido designados el 29 de mayo de 2023 para un período de cinco años y el 4 de junio tomaron posesión de sus cargos, por lo que llevaban menos de 12 meses en las funciones.
En los primeros meses de 2024 también fueron renovados los titulares de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) y de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC). Dos organizaciones que forman parte del Consejo de Estado.
El 4 de abril, en la clausura del Congreso de la UJC, se anunció que Meyvis Estévez Echevarría, vicepresidenta de la organización, sustituiría a Ailyn Álvarez García quien pasó a ocupar responsabilidades en el Partido que todavía no se han hecho púbicas.
El puesto de Rafael Ramón Santiesteban Pozo al frente de la ANAP lo ocupa desde el 2 de marzo Félix Duarte Ortega, quien era miembro del Secretariado y jefe del Departamento Agroalimentario del Comité Central del Partido.
Los funcionarios partidistas son movidos de sus funciones, pero salvo algunas excepciones y sacrificios necesarios, el poder no prescinde de sus fieles y tampoco expone sus errores.
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