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Autor

Alexandra Panzarelli
Candidata doctoral en Ciencias Políticas en The New School for Social Research. Coautora de «Populismo, rentismo y socialismo del siglo XXI en Venezuela», publicado por Johns Hopkins University Press en 2013, así como de varios artículos sobre democracia y populismo y movimientos sociales. Tiene una maestría en Ciencias Políticas de New York University (2009) con el apoyo de la beca Fulbright y es egresada de Ciencias Políticas y Administrativas de la Universidad Central de Venezuela (2003). Actualmente, da clases en Yeshiva University de Política Latinoamericana, Política Comparada y de derechos humanos en Marymount Manhattan College
El 10 de diciembre de 2024, mientras dictaba una clase en Nueva York, decenas de mensajes comenzaron a iluminar mi teléfono al mismo tiempo. Cada uno traía la noticia que había temido durante meses: las fuerzas de seguridad venezolanas habían secuestrado a mi amigo, el líder comunitario Jesús Armas.
Mientras el comandante eterno continúa consumiendo al pueblo más allá de su tumba, una clase política corrupta y aislada avanza con su baño de sangre.
Autores

Alexandra Panzarelli
Candidata doctoral en Ciencias Políticas en The New School for Social Research. Coautora de «Populismo, rentismo y socialismo del siglo XXI en Venezuela», publicado por Johns Hopkins University Press en 2013, así como de varios artículos sobre democracia y populismo y movimientos sociales. Tiene una maestría en Ciencias Políticas de New York University (2009) con el apoyo de la beca Fulbright y es egresada de Ciencias Políticas y Administrativas de la Universidad Central de Venezuela (2003). Actualmente, da clases en Yeshiva University de Política Latinoamericana, Política Comparada y de derechos humanos en Marymount Manhattan College
El 10 de diciembre de 2024, mientras dictaba una clase en Nueva York, decenas de mensajes comenzaron a iluminar mi teléfono al mismo tiempo. Cada uno traía la noticia que había temido durante meses: las fuerzas de seguridad venezolanas habían secuestrado a mi amigo, el líder comunitario Jesús Armas.
Mientras el comandante eterno continúa consumiendo al pueblo más allá de su tumba, una clase política corrupta y aislada avanza con su baño de sangre.

