En lo que va de año, al menos 11 cubanos han fallecido en el estrecho de la Florida mientras otros 54 se mantienen desaparecidos. Si bien se ha sabido de 2 embarcaciones y sus 37 tripulantes que lograron llegar a su destino, las rutas irregulares a las que se lanzan quienes sienten que no tienen otra opción dejan cada vez a más familias entre la angustia y el duelo.

El primero de esos eventos desafortunados ocurrió el 23 de enero de 2023, frente a las costas de Cárdenas, Matanzas, cuando un trágico naufragio cobró la vida de, al menos, 11 personas y dejó a 9 en paradero desconocido. La embarcación, con una tripulación de alrededor de 31 personas, había salido de la isla el día anterior desde la zona de Torrontela, con el objetivo de llegar a territorio estadounidense. El bote se volcó por Cayo Cruz del Padre, y solo se rescataron 11 sobrevivientes.

Luego, el 28 de junio de 2023, los guardacostas estadounidenses interceptaron y transfirieron a 14 migrantes cubanos y 1 fallecido a Bahamas, después de que la Guardia Costera de EE. UU. detuviera al grupo. Durante la intervención, las autoridades intentaron resucitar al cubano que llevaba 30 minutos inconsciente, pero lamentablemente no sobrevivió.

Históricamente, la ruta marítima ha sido la más empleada para los flujos migratorios irregulares entre Cuba y Estados Unidos. Se estima que en el año 1980, cuando ocurrió el éxodo del Mariel, abandonaron el país alrededor de 125 000 cubanos; y catorce años más tarde, en 1994, más de 30 mil cubanos protagonizaron la llamada crisis de los balseros.

En el reciente éxodo hubo un cambio de patrón, convirtiéndose «la ruta de los volcanes» en la trayectoria más frecuente. Entre octubre de 2022 y junio de 2023 se registró la llegada de 389 082 cubanos a las fronteras de Estados Unidos. Sin embargo, no cesaron los intentos de llegar a territorio estadounidense mediante embarcaciones, en muchos casos precarias. 

Entre enero de 2021 y junio de 2023, la patrulla fronteriza de Estados Unidos detuvo a 7 479 migrantes cubanos en el Estrecho de la Florida. Hacia finales de 2022, se alcanzaron las mayores cifras del periodo, superando los tres mil emigrantes en tres meses. 

En febrero de 2023, tras la implementación del Programa de Parole Humanitario y el aumento de las sanciones a quienes intentan llegar de forma irregular a los Estados Unidos, disminuyó nuevamente el flujo marítimo. Quienes no emplean las rutas legales de entrada al país y son detenidos por las autoridades migratorias están expuestos a la devolución a Cuba, el encarcelamiento en Bahamas, al procesamiento penal y la prohibición de reingreso a través de otras vías legales.

INCIDENTES EN LAS TRAVESÍAS: DESAPARICIONES Y MUERTES

Las variaciones en los patrones migratorios pueden estar asociadas a cambios en las políticas migratorias, lo que implica a la vez transformaciones en las estrategias de las personas que buscan abandonar el país. 

Ejemplo de ello es que la mayor crisis migratoria de Cuba inició con la decisión de Nicaragua de eliminar el requisito de visado a los ciudadanos cubanos en noviembre de 2021. Luego, con el cierre de las fronteras estadounidenses y la inclusión de Cuba en el Programa de Parole Humanitario en enero de 2023 disminuyó considerablemente el flujo migratorio irregular por la ruta terrestre que atravesaba Centroamérica.

Preguntas y respuestas sobre el nuevo proceso de parole para cubanos

elTOQUE Jurídico resume preguntas y respuestas de los asuntos más importantes que deben conocer los cubanos que pretendan emigrar desde el 6 de enero de 2023 a Estados Unidos.

Por otra parte, los flujos irregulares se restablecen cuando las nuevas vías no logran suplir la demanda. Esto fue lo que ocurrió en el caso de los venezolanos tras la entrada en vigor del parole humanitario en octubre de 2022. Tras 5 meses de su implementación y el bajo nivel de respuesta a los solicitantes, se restablecieron las trayectorias irregulares masivas hacia Estados Unidos, al superar los 40 000 encuentros con la patrulla fronteriza en abril de 2023. Con dicho referente, no sería descabellado pensar que algo similar pueda ocurrir a los cubanos. 

Durante la travesía, ya sea por tierra o mar, el migrante se expone a diversas circunstancias: rescates en situaciones de peligro potencial, detenciones por parte de las autoridades migratorias, intercepciones llevadas a cabo por la guardia costera de EE. UU. y su posterior transferencia a sus homólogos en Bahamas, o la repatriación a Cuba. En otros casos, se reporta la muerte o desaparición de los migrantes. Estas situaciones son denominadas eventos desafortunados en el proyecto «Migrar: una decisión de vida y muerte» de elTOQUE, el cual recopila la información presentada en este artículo.

Entre enero de 2021 y julio de 2023 en elTOQUE registramos un total de 849 incidentes que involucraron a cubanos que se dirigían hacia Estados Unidos por rutas irregulares, tanto terrestres como marítimas. La mayoría de los eventos ocurrieron en 2022, con un total de 534 episodios, seguido por el año 2021 con 202 eventos y 2023 con 114 eventos. 

Al analizar las rutas utilizadas por los migrantes cubanos, destaca que la mayor parte de los eventos ocurrieron en rutas marítimas, con un total de 649 casos reportados en su mayoría naufragios, intercepciones y devoluciones.

En la trayectoria migratoria marítima que separa el archipiélago cubano de Estados Unidos, se han registrado 230 detenciones y 228 repatriaciones, lo que evidencia la constante vigilancia y control migratorio por parte de la guardia costera norteamericana. Además, se han registrado 60 intercepciones y 27 transferencias de personas migrantes; es decir, casos en los que la Guardia Costera de EE. UU. detuvo a un grupo de balseros cubanos en las aguas territoriales de Bahamas y los entregó a las autoridades de dicho país.

Afortunadamente, se realizaron 23 operaciones de rescate que permitieron salvar vidas en situaciones de peligro, pero también se han reportado 25 operaciones en las que se registraron personas desaparecidas o fallecidas. Además, entre 2021 y 2023 se han realizado cuatro vuelos de deportaciones en los cuales 258 personas han sido devueltas a Cuba.

EL DRAMA DE LOS MIGRANTES CUBANOS DESAPARECIDOS

El 7 de febrero de 2021, Yoel Rudy (de 18 años) y otras nueve personas salieron desde Alamar, en La Habana, rumbo a Estados Unidos en una embarcación precaria. El grupo nunca llegó a su destino. Desde entonces se desconoce el paradero de los cubanos.

Relatos similares se han multiplicado en los últimos tres años. Entre 2021 y 2023 han sido identificadas un total de 271 personas desaparecidas, de las cuales se ha logrado establecer contacto con 85 de sus familiares. Las edades más frecuentes están entre los 24 y los 30 años, seguido por las personas entre 31 y 38.

En cuanto al lugar donde se produjeron las desapariciones, existe un número significativo de casos (un total de 177 eventos) en los que la ubicación es desconocida. No obstante, se registraron 51 eventos de desapariciones en aguas territoriales de Estados Unidos, 11 en las de Cuba, 10 en Bahamas, 7 en Islas Caimán y 1 en México.

Al analizar la provincia de origen de los migrantes desaparecidos, se observa que en 124 casos se desconoce la provincia de la que provenían. De los que sí se ha identificado el lugar de procedencia, el mayor número se ha registrado en Matanzas (46 casos) y en Villa Clara (22 casos). En menor medida, también se incluyen Artemisa, Sancti Spíritus, Camagüey, La Habana, Ciego de Ávila. En relación al municipio de origen de los desaparecidos, en 162 casos se desconoce el municipio de procedencia. Entre los municipios identificados se encuentran Cárdenas, Santa Clara, Corralillo, Caibarién, Playa Baracoa en Bauta, Martí, Altagracia, Matanzas y Nuevitas.

Estados Unidos reactiva el Título 8 y anuncia nuevas medidas para la admisión de migrantes

A partir del 12 de mayo de 2023 volverá a entrar en vigor el Título 8 de la Ley de Inmigración de Estados Unidos y comenzarán a funcionar centros regionales de procesamiento en Colombia y Guatemala.



TRÁGICOS NAUFRAGIOS: VIDAS PERDIDAS EN EL MAR

El 23 de septiembre de 2022, durante el paso del huracán Ian por la región, agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. socorrieron a cuatro migrantes cubanos que nadaron hasta la costa de Stock Island, luego de que su embarcación naufragara debido a las inclemencias del tiempo. Los sobrevivientes informaron que habían otras 23 personas desaparecidas de las cuales solo se pudo rescatar a nueve. 

Durante los naufragios ocurridos de 2021 a 2023 se registraron 37 fallecimientos de migrantes cubanos (20 hombres y 16 mujeres). Aunque en 16 casos se desconoce la edad, al menos 3 personas tenían 19 años, el resto se encontraban entre los 20 y los 56 años de edad. Destaca la muerte de al menos dos menores de edad de 3 y 16 años y un bebé de 9 meses. 

En cuanto al país donde ocurrieron los fallecimientos, se observa que 14 de ellos tuvieron lugar en aguas de Estados Unidos, seguido de 13 casos en territorio marítimo cubano. Además, se registraron nueve casos en lugares desconocidos. También se reportó un fallecimiento en las cercanías de la ciudad portuaria Progreso, situada en la península de Yucatán, México. 

Este último evento, en el que estuvieron involucradas seis personas en agosto de 2021, demuestra que las rutas marítimas no tienen solamente Florida como destino, sino que durante la reciente crisis migratoria varias embarcaciones cubanas fijaron rumbo hacia las costas de México.

En relación al lugar de origen o residencia de los migrantes fallecidos, en 21 casos se desconoce esta información. Entre los lugares identificados destaca Cárdenas, de donde provenían al menos seis de las personas fallecidas, y otros municipios de origen como Güira de Melena, Holguín, La Habana, Trinidad, Artemisa y Guane.

Aunque todavía existe un vacío de información considerable, las cifras evidencian la necesidad de tomar medidas urgentes para prevenir las tragedias asociadas a las rutas migratorias irregulares, así como de brindar apoyo y acompañamiento a las familias de las personas fallecidas y desaparecidas.