El turismo en Cuba —un rubro que la dirigencia del Partido Comunista considera la «locomotora de la economía»— vive sus peores momentos de los últimos años, con una caída de visitantes extranjeros y la estampida de clientes históricos hacia otros destinos caribeños.
Entre las causas está la crisis energética de la isla, donde se viven frecuentes y largos apagones; también, el incremento de las alertas de inseguridad en el país y la escasez de alimentos y productos básicos. Asimismo, el actual estado general de los hoteles y la falta de mantenimiento disminuyen el estándar del servicio prometido por las agencias de viajes.
Así lo constató un ciudadano español que se comunicó con elTOQUE para denunciar la mala experiencia que pasó cuando viajó a Cuba, en días recientes, para celebrar la luna de miel con su pareja de nacionalidad cubana.
«He puesto una querella tanto por el alquiler del coche, una basura carísima, la comida putrefacta del hotel, así como sus bebidas», afirmó en mensajes enviados a nuestro número de WhatsApp (+1 786 403 8554).
El denunciante estuvo en un hotel de Cuba del 7 al 11 de mayo de 2025. Esperaba disfrutar de un viaje familiar con su hija y su esposa, por lo que mediante la agencia Book to Cuba rentó un Hyundai a la empresa estatal Havanautos y reservó en el hotel Jardines del Rey, Cayo Coco, en Ciego de Ávila —instalación administrada por la cadena Meliá—. La realidad que encontró en la isla fue muy distante de la que imaginaba.
En videos enviados a esta redacción, muestra el automóvil que alquiló —un vehículo modelo Grand i10— con abolladuras en la carrocería, pintura rayada, asientos viejos y con manchas, entre otros detalles. «Esto va perdiendo aceite por todos lados, así que tienes que echarle tres litros de aceite. Estoy cambiando la rueda porque mira lo que llevaba puesto, al primer bache se va a la m…», dijo en uno de los videos.
También se decepcionó de la calidad del servicio de «un hotel 5 estrellas como es Jardines del Rey que lo tienen en el aeropuerto como lo mejor de lo mejor». Entre sus críticas, enfatizó en la mala calidad del menú, que fue igual durante varios días.
Denunció que le ofrecieron «refrescos de sobres [instantáneos]». Cuando se acababa la bebida, tardaban días en reponerla y en los bufés «la mitad [de las bandejas] estaban vacías».
Varias imágenes tomadas en el hotel y proporcionadas a elTOQUE muestran platos pobremente surtidos y comida en aparente mal estado. En otro video, el cliente estira una masa y explica: «no son trozos de carne, es un dulce (…); esto es una m…, una vergüenza», dice notablemente molesto por el servicio.
Sobre las opciones recreativas aseguró que a las diez de la noche se acababan los espectáculos: «consistían en un mísero karaoke y música puesta con un teléfono que se cortaba cada cinco minutos ¡porque no funcionaba el Internet!», contó el visitante español.
También aseveró haber visto muy pocos clientes en el hotel, solo rusos y canadienses muy embriagados.
«Locomotora» trabada
En 2024, Cuba recibió 2.2 millones de turistas internacionales, lo que representa una caída del 9.6 % respecto a los 2.4 millones de 2023. La cifra es la más baja en 17 años, excluyendo los años de la pandemia de COVID-19.
La actual temporada se encamina a ser peor. Durante el primer trimestre de 2025 se registraron 571 772 turistas internacionales, una disminución del 29.7 % en comparación con igual período de 2024.
Incluso, mercados que antes se consideraban relativamente seguros para el turismo en Cuba, están haciendo agua. La isla dejó de ser el destino favorito de los canadienses en el Caribe. En el primer trimestre de 2025, apenas 272 274 canadienses llegaron a Cuba. Lo anterior representa una caída del 31.8 % en comparación con igual período de 2024, cuando arribaron 399 254 personas del país norteamericano.
A pesar del declive de la industria y la disminución constante en la llegada de turistas durante los últimos años, el Gobierno cubano ha priorizado las inversiones en el sector, mientras desatiende los servicios públicos y otras áreas de la economía que impactan directamente en la vida de la población.
Durante el primer semestre de 2024, las autoridades destinaron el 40 % de sus inversiones a actividades vinculadas con el turismo. Hasta septiembre de 2024, se invirtió 4.6 veces más en la categoría «Servicios empresariales, actividades inmobiliarias y de alquiler» —incluye parte del turismo— que en la suma de Agricultura, Educación y Sanidad, según datos oficiales.
Aunque el régimen del Partido Comunista de Cuba achaca la agudización de la crisis nacional ocurrida el último lustro al sistema de sanciones de Estados Unidos, aproximaciones académicas destacan «las deficiencias críticas de la industria turística cubana» como la principal causa del declive.
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Raimundo Mollinedo