Sin importar quién ni de dónde escriba, el grupo hotelero Cubanacán responde un mensaje automatizado en la aplicación Messenger: «El pago de su reserva se efectúa a través de tarjetas internacionales que operan en dólares estadounidenses (USD) o euros».

Ante la pregunta de si es posible hacer pagos en pesos cubanos (CUP), la respuesta —a modo de consuelo— es «por el momento no. Le mantendremos al tanto cuando tengamos ofertas en CUP».

El Grupo Gaviota tampoco facilita los pagos en CUP, aunque en su web institucional aseguran que los clientes pueden pagar con diferentes monedas y tarjetas, incluidas las en CUP de los bancos Bandec, Metropolitano y BPA. A través de la página solamente es posible reservar en divisas. La opción de moneda nacional (CUP o MLC) no existe.

Para los cubanos, la accesibilidad a instalaciones turísticas, incluso a las más modestas, es limitada. Casi siempre los pagos deben efectuarse en divisas extranjeras y a través de tarjetas internacionales, lo que complica aún más la situación para los residentes en la isla.

Sin embargo, no son solo los servicios del turismo los que deben pagarse en moneda dura.

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La «normalización» de las ofertas en dólares

La oferta por «el Día de las Madres» que publicitó Cubadebate generó varias reacciones de descontento entre los usuarios. No por el descuento del 50 % en los precios de los equipos electrodomésticos «para sorprender a mamá», sino porque algunos, como las cajas decodificadoras, no se venden en moneda nacional a la población ni siquiera por la premura del cercano «apagón analógico».

«Indignante. En muchas tiendas en MLC no hay y en otras a veces te dicen que no te las pueden vender si no compras un televisor. En moneda nacional ni siquiera hay», contó un usuario.

Varias tiendas online ofertan equipos y accesorios que antes se vendían en las tiendas en CUC y que hoy solo se encuentran —algunas— en las tiendas en MLC u online.

Productos básicos para el hogar como lo es un bombillo y otros accesorios de ferretería y plomería se comercializan a través del pago con tarjetas internacionales. Algunos, incluso, son producidos por empresas cubanas como la Empresa Industrial para la Informática, las Comunicaciones y la Electrónica (Gedeme).

Tras el inicio de la Tarea Ordenamiento y ante la «convocatoria» de las autoridades cubanas a las empresas estatales para generar ingresos en divisas, es lógico que las pocas producciones que se hacen en Cuba se comercialicen a través de tiendas online si no quieren tener pérdidas.

Ceballos, La Conchita y Yumurí son algunas de las entidades productoras de alimentos que comercializan sus productos en dólares.

Otras, como la empresa de telecomunicaciones Etecsa, brindan «ofertas» que solamente son posibles pagar desde el extranjero y con tarjetas internacionales.

¿Cuándo Etecsa ofrecerá una oferta para los cubanos de Cuba? Tal parece que es una empresa extranjera, preguntó el usuario Liuber Rolando Concepción Cruz en una publicación en redes del monopolio cubano.

Para colmo, la oferta ni siquiera daba detalles de los precios porque «los distribuidores forman los precios teniendo en cuenta la transacción y la tasa de cambio en cada país. La información debe ser pública en el sitio del Distribuidor Internacional», explicaba la «promoción».

Desde hace varios años, Etecsa promociona —al menos una vez al mes— ofertas de «recargas internacionales» para usuarios cubanos. Dirigidas a la diáspora, las remesas a través de recargas telefónicas han sido una de sus principales fuentes de ingresos.

En declaraciones recientes a la prensa, Lidia Esther Hidalgo Rodríguez, vicepresidenta comercial de Etecsa, calificó de «desfavorable» la actual falta de ingresos de divisas. «Los ingresos en divisa, a lo largo de este año [2024], disminuyeron en un 30 % con respecto a igual período de 2023».

Según informó Hidalgo Rodríguez, se estiman en millones de dólares las pérdidas por sitios web fraudulentos que clonan la identidad de Etecsa y crean opciones de recarga desde el extranjero.

El aumento de la frecuencia y «ventajas» de las promociones y la tendencia a la depreciación del peso cubano confirman que los ingresos por concepto de recargas han disminuido.

Las ofertas más recientes, por ejemplo, promocionan recargas en las que el saldo principal se multiplica por 12. O sea, si se recargan 500 CUP (20 USD porque Etecsa mantiene la tasa de 1 USD por 25 CUP más la comisión del intermediario), el usuario en Cuba tendría 7 500 CUP de saldo.

Más allá de las «atractivas ofertas», la lógica matemática indica que, si un USD cuesta 280 CUP en el mercado informal (tasa del día 4 de junio de 2024) y un paquete de 9 GB (conexión 3G y 4G) vale 500 CUP, con 20 USD (equivalente a 6 000 CUP en el mercado informal y el monto mínimo de la mayoría de las recargas) un cubano que lo venda en efectivo se podría comprar 12 paquetes de ese tipo.

Un reporte de Granma asegura que «según los parámetros de la tasa de cambio informal, un giga de datos móviles equivale a 0.17 USD, la menor correlación en el Caribe».

elTOQUE contactó con dos empresas que brindan servicios de recargas a Cuba y confirmaron que estas han disminuido en los últimos años. Una de ellas aseguró, incluso, que desde el inicio de la Tarea Ordenamiento en enero de 2021, el número de recargas a través de sus plataformas ha disminuido entre un 60 y un 65 %.

En su empeño de ingresar divisas, Etecsa promociona también la venta de equipos y otros servicios para cubanos, pero pagados en divisas desde el extranjero.

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Transportación en dólares

La imposibilidad para acceder en moneda nacional a servicios vinculados con el turismo no solo existe en determinadas instalaciones y grupos hoteleros. La transportación a través de Viazul, por ejemplo, solamente es posible pagarla con tarjetas internacionales.

«Con lo alto que están los precios, viajar en Viazul vale la pena, pero no es posible hacer pagos en Cuba, a no ser que tengas una tarjeta Visa o Mastercard», comenta un emprendedor de Puerto Padre.

Según relató a elTOQUE, a pesar de tener una tarjeta Clásica en USD no la aceptaron para el pago de una reservación de un viaje hasta La Habana. Tampoco pudo usar su cuenta en MLC. «Mi hija tuvo que comprarme el pasaje desde Alemania».

La Empresa de Ómnibus Nacionales, propietaria de la marca y servicio Viazul, explica en su página web que solo comercializan en dólares o euros a través de tarjetas internacionales porque la empresa no tiene cuenta en MLC —aunque la han solicitado en reiteradas ocasiones, no ha sido aprobada—.

En el apartado de Preguntas Frecuentes, Viazul también indica que, a pesar de comercializar sus capacidades en divisas, completa los asientos a través de las listas de espera en moneda nacional.

Según exponen, ello asegura que no se viaje con autobuses semi vacíos, lo cual sería costoso e ineficiente y «va en contra de los principios de la sociedad socialista cubana, que desaprueba dejar a los pasajeros sin servicio mientras hay asientos disponibles».

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«La tarjeta Clásica ofrece mayores opciones financieras y seguridad» tituló Granma un reporte en el que informaron que de enero al 12 de mayo de 2024 se habían vendido «25 000 tarjetas Clásicas denominadas en USD».

Entre las ventajas de las tarjetas, Alfredo Martínez González, gerente adjunto de Fincimex, ejemplificó los «descuentos del 10 % por pagos en el grupo de turismo Gaviota y de un 5 % por compras en la red comercial minorista de Cimex, Tiendas Caribe y Trimagen».

Los comentarios de la publicación mostraron el descontento de los usuarios, no solo por otra nueva forma de pago que casi inutiliza las tarjetas en MLC, sino por los problemas burocráticos y de infraestructura (no todos los TPV o Post están configurados para aceptarlas) de la Clásica.

Varios negocios privados también han optado por tarjetas en dólares para vender sus productos a la población.

El establecimiento de Mercocaribe ubicado en las calles 5ta y 110 en La Habana, solo permite la compra a personas con la tarjeta de esa entidad. A simple vista, los anaqueles surtidos de varios tipos de productos llaman la atención de los transeúntes, pero solo es posible adquirirlos si se tiene una tarjeta exclusiva del negocio.

De acuerdo con la información disponible en la web, Mercocaribe ofrece tarjetas de compra recargables de 25 USD a 500 USD para usar en su tienda física en la capital cubana. Tienen un período de vigencia y el monto se puede dividir entre varios beneficiarios aunque no es posible la transferencia de saldo entre tarjetas.

Las tarjetas para comprar en el establecimiento habanero deben ser pagadas en divisas extranjeras.

«No es que los productos en MLC los quitemos de otros mercados y que el que no tenga dólares sencillamente no coma. Eso no es ni será Cuba. Se trata de respaldar ofertas para un segmento de mercado que puede pagar en divisas», explicó al pueblo el exministro de economía y planificación Alejandro Gil en julio de 2020.

Durante la comparecencia en la televisión, Gil Fernández explicó que se trataba de una medida necesaria para captar las divisas de «un segmento de la población».

No solo se sacaron productos de los mercados en CUP para abastecer las tiendas en MLC —hoy muchas desabastecidas—, sino que además según confirmaron varias fuentes a elTOQUE, en algunas tiendas en MLC ahora solo se puede comprar con las nuevas tarjetas en dólares de Bandec y Fincimex.