El Gobierno de Estados Unidos anunció hoy (28 de julio de 2023) su intención de aceptar el reasentamiento de personas que califiquen como refugiados provenientes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, siempre y cuando se encuentren en México.

Según el anuncio oficial, las medidas se tomaron tras reuniones desarrolladas a principios de semana en México entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y una delegación estadounidense liderada por la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall. El objetivo es ampliar el acceso a vías seguras, ordenadas y legales de migración.

La Casa Blanca expresó su apoyo a la concreción de un espacio multipropósito internacional que el Gobierno de México planea establecer en el sur del país para ofrecer nuevas opciones de refugio y empleo a las personas más vulnerables que se encuentran actualmente en territorio azteca.

El comunicado no proporcionó detalles específicos sobre el funcionamiento del programa, fechas o requisitos para la solicitud de refugio; tampoco precisó en qué consistirá el «espacio internacional multipropósito» en México.

El pasado jueves, Blas Núñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad Interior de EE. UU., informó en conferencia de prensa que desde la entrada en vigor del Título 8 —el 12 de mayo de 2023— Estados Unidos envió a 4 000 cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos a México.

El abogado cubanoamericano Wilfredo Allen aseguró en entrevista con Daniel Benítez que el nuevo programa de refugio busca aliviar la presión migratoria en las fronteras terrestres de México, tanto al norte con Estados Unidos como al sur con Guatemala.  

Allen explicó, además, que existe una diferencia entre los migrantes que ingresan a través de la aplicación CBP-One con parole y quienes reciben la condición de refugiados. Mientras los primeros deben defender su solicitud de asilo ante la Corte de Inmigración, los segundos tienen acceso legal a territorio estadounidense, con la posibilidad de obtener la residencia y aplicar a programas especiales de apoyo sin presentarse ante un juez.

El parole humanitario, los programas de reunificación familiar y la solicitud de asilo a través de la aplicación CBP-One en la frontera son procesos independientes. El nuevo programa anunciado hoy por la Administración Biden se suma a la lista de opciones que tienen los cubanos para acceder a Estados Unidos.

Las autoridades estadounidenses reiteraron a los migrantes en el comunicado que deben optar por vías legales para el ingreso al país y que quienes intenten entrar de forma irregular enfrentarán consecuencias graves, incluida la deportación, posibles procesamientos penales y la prohibición de reingreso.

Según cifras de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), al cierre de julio de 2023 un total de 29 532 haitianos, 5 034 cubanos y 3 511 venezolanos habían solicitado protección internacional en tierra azteca. Las tres nacionalidades representaban el 51 % del total de solicitudes recibidas por la Comar en 2023. 

Por su parte, la guardia fronteriza estadounidense reporta que en lo que va de año (desde enero hasta el cierre de junio) se ha registrado el cruce fronterizo de 54 634 cubanos, 150 686 venezolanos, 87 383 haitianos y 29 922 nicaragüenses, lo que ratifica a EE. UU. como el principal destino de la región.

Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), los refugiados son personas que se encuentran fuera de su país de origen debido al temor a la persecución, conflictos, violencia generalizada u otras circunstancias que han perturbado gravemente el orden público y que, en consecuencia, necesitan protección internacional.

A diferencia del asilo, que se solicita dentro del territorio en el que se pide protección internacional, el refugio es un trámite que se realiza fuera del país en el que se busca asilo.

Cuando los inmigrantes se encuentran en grave peligro o tienen necesidades imposibles de satisfacer en el país donde buscaron protección, es viable el reasentamiento, que consiste en el traslado de personas refugiadas de un país de acogida a otro Estado que ha convenido recibirlos y, en última instancia, otorgarles residencia permanente.