Aunque las autoridades cubanas afirman que los órganos de justicia siguen una política de severidad —sinónimo de más cárcel—, la tasa de homicidios por cada 100 000 habitantes aumenta en el país, según estimaciones realizadas por un equipo de elTOQUE. 

Para estimar el incremento de la tasa de muertes intencionales hay que partir de que no existe información oficial sobre el comportamiento de la violencia en la isla. Los últimos datos en relación con los homicidios corresponden a 2019 y hablan de que durante el año se produjeron, al menos, 500 hechos de ese tipo. Con el número de muertes y una población de más de 11 millones de personas, para entonces la tasa se cifró en 4.4 por cada 100 000 habitantes.

Si se considera la postura oficial —que asegura que en 2023 los delitos violentos (incluidos los homicidios intencionales) mantuvieron la misma incidencia que en 2019—, se concluye que la tasa de este tipo de hechos en el país aumentó en un rango de entre 0.6 y 1.4 puntos. El resultado final dependerá de la cifra de población cubana que se utilice (debido a la reducción sufrida tras la crisis migratoria).

De acuerdo con la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), la cantidad de habitantes en la isla se redujo de más de 11 millones en 2019 a 10 055 968 en diciembre de 2023. Al tomar como referente el número poblacional de 2023, la tasa de homicidios intencionales sería 4.97.

Reconocen disminución alarmante de la población cubana en Asamblea Nacional

Cuba experimenta una crisis demográfica sin precedentes, con un decrecimiento del 10 % de su población en cuatro años según cifras oficiales. Este declive se debe principalmente a una alta emigración y un crecimiento natural negativo. La población actual se estima en 10 millones, similar a la de 1985, aunque estudios independientes sugieren cifras aún menores.

Sin embargo, la investigación independiente desarrollada por el economista y demógrafo Juan Albizu-Campos deduce que la cifra actual de residentes efectivos es de 8 620 000. Lo anterior se traduce en una tasa de homicidios de 5.80. 

Con independencia de la reducción poblacional, más de una persona ha sido asesinada en Cuba cada día, al menos, en los últimos cinco años. 

Por otra parte, aunque los datos oficiales más recientes (2019) indican que el 79 % de las víctimas de homicidios intencionales son hombres, organismos independientes señalan un aumento en el número de víctimas mujeres. El observatorio de género de Alas Tensas registró 32 feminicidios en el país en 2020. En 2021, 2022 y 2023 reportó 35, 36 y 89, respectivamente.

No obstante, los datos anteriores son apenas un subregistro del fenómeno, como también los del oficialista Observatorio de Cuba sobre Igualdad de Género —creado, entre otras razones, en respuesta a las iniciativas independientes impulsadas por la sociedad civil—. El ente gubernamental informó que en 2023 se juzgaron 60 casos de asesinatos de mujeres, sin que exista otro dato oficial sobre muertes violentas por razones de género que incluya los delitos de este tipo y no se base de forma exclusiva en los juicios efectuados. 

60 es una cifra inferior a la que reportó de forma autónoma la ciudadanía. Asimismo, la disminución de la población cubana sugiere un aumento en la tasa de feminicidios por cada 100 000 mujeres.

¿Por qué el Gobierno cubano evade el término «feminicidio»?

La propuesta de Mariela Castro de incluir el feminicidio como delito en el nuevo Código Penal aspiró a reconocer la existencia de un problema que ha sido negado o, como mínimo, ocultado por las autoridades cubanas en otras oportunidades; incluso, por ella misma.

elTOQUE Jurídico insiste en la idea de que la estadística oficial no es creíble, en tanto no es verificable. Una encuesta independiente de Cubadata sobre seguridad ciudadana indica que el 61 % de los participantes dice haber sido víctima de algún tipo de violencia y de actos de delincuencia en los meses previos a la aplicación del cuestionario. 

La percepción del aumento de la violencia en el país pudiera no ser solo un espejismo debido a la socialización de la información a través de Internet, como afirmaron funcionarios invitados al programa Hacemos Cuba en marzo de 2024. En los últimos años, los cubanos experimentaron la profundización de una crisis económica que data de décadas atrás. Precisamente, en períodos previos de penurias económicas se han elevado también los niveles de criminalidad.

En ese sentido, las tasas de homicidios intencionales más altas de las últimas cuatro décadas en Cuba corresponden a 1993, 1994 y 1995, años del «Período Especial». En particular, en 1994 se reportaron 690 asesinatos, el mayor número en un año natural hasta la fecha.

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