Es cierto que en una Cuba con centenares de presos políticos no solo se debe poner la mirada en Maykel y Luis Manuel, pero tampoco dejarlos solos. El juicio a ambos parece ser el fin del más reciente ciclo de protestas populares que ha vivido Cuba.

Maykel Osorbo y Luis Manuel Otero no fueron juzgados por delitos comunes, sino por su actividad política. Foto: Facebook.

¿De qué acusan a Luis Manuel Otero y Maykel «Osorbo»?

3 / junio / 2022

elTOQUE

Maykel «Osorbo» Castillo y Luis Manuel Otero Alcántara fueron juzgados el 30 y 31 de mayo de 2022. Un Tribunal cubano definirá en los próximos días si merecen las penas de siete y diez años de prisión que la Fiscalía solicita para ellos.

Por más que la propaganda gubernamental se empeñe en demostrar el carácter delincuencial de Maykel y Luis Manuel, pocos dudan que su procesamiento ocurrió porque desafiaron al poder cubano y no porque violaron la ley.

Maykel y Luis Manuel no fueron juzgados por delitos comunes, sino por su actividad política.

¿De qué acusa el Gobierno cubano a Maykel Castillo y Luis Manuel Otero?

Maykel Castillo se encuentra detenido desde mayo de 2021. El grueso de la acusación en contra de Maykel se concentra en lo sucedido el domingo 4 de abril de 2021. Ese día, en la sede del Movimiento San Isidro (MSI), se organizó una manifestación de protesta, según declarara Luis Manuel Otero Alcántara, en apoyo a las personas que se mantenían en huelga de hambre en la sede de la Unión Patriótica de Cuba. Decenas de vecinos apoyaron la iniciativa y corearon en plena calle temas musicales contestatarios, entre ellos «Patria y Vida».

Más temprano, agentes de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) habían intentado apresar al rapero Maykel «Osorbo»; detención que fue frustrada gracias a la intervención de amigos y vecinos, quienes lo ayudaron a escapar. Ese fue uno de los motivos principales por el cual el músico sería apresado. Anterior a esa fecha, Maykel había sido detenido en cerca de 120 ocasiones.

Las autoridades cubanas se apoyaron en la detención frustrada para asegurar que Maykel Castillo atacó a los policías involucrados y que se resistió al arresto. Esas acciones, según la Fiscalía, convierten a Osorbo en autor de un delito de atentado y otro de resistencia.

Al atentado y la resistencia se suman otros delitos comúnmente utilizados por el poder para limitar la libertad de expresión. Los ejemplos clásicos son desacato y desórdenes públicos, de los cuales también está acusado Luis Manuel.

A Maykel además se le acusa por realizar una transmisión en Facebook en septiembre de 2020. Una transmisión que, según la Fiscalía, tipifica un delito porque «responsabilizó injustificadamente a los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, a Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, presidente de la República de Cuba, y a Manuel Marrero Cruz, primer ministro, por la falta de recursos médicos para solucionar las enfermedades que presentaba la población como consecuencia de la COVID-19».

Maykel nunca fue señalado por esas declaraciones hasta casi un año después. Para «engordar» su expediente, la Fiscalía asegura que debe responder por haber mentido públicamente al señalar a Díaz-Canel y a Marrero como los principales responsables de la falta de recursos médicos y de la situación imperante en el país.

Pasó más de un año también desde que Luis Manuel hizo su performance «Drapeau», en el que usó la bandera nacional como segunda piel. En aquella ocasión estuvo 12 días en prisión acusado de ultraje a los símbolos de la patria. El juicio sumario que le realizarían se suspendió y lo excarcelaron gracias a la presión de amigos y la sociedad civil. La nueva detención de Otero Alcántara ocurrió el 11 de julio de 2021, pero el poder cubano decidió juzgarlo por sucesos pasados.

Es cierto que en una Cuba con centenares de presos políticos no solo se debe poner la mirada en Maykel y Luis Manuel, pero tampoco dejarlos solos. El juicio a ambos parece ser el fin del más reciente ciclo de protestas populares que ha vivido Cuba. Un ciclo que muchos consideran inició por el empuje del movimiento al que ambos pertenecen: San Isidro.

El siguiente video amplía los detalles del caso.