Así reprime la Policía política en Cuba. Testimonios de periodistas, artistas y activistas
15 / octubre / 2024
Una nueva oleada represiva, contra los periodistas y colaboradores de medios independientes cubanos que viven en la isla, comenzó en septiembre de 2024.
La policía política está empleando tácticas de coacción y manipulación para neutralizar el periodismo no estatal. Los periodistas han sido interrogados durante varias horas, amenazados y chantajeados.
Al menos 20 colaboradores de varios medios independientes, gestores de proyectos sociales, activistas y creadores de contenido, fueron forzados a declarar en relación con una instrucción penal sobre el delito de «mercenarismo» —el cual establece penas de entre cuatro y diez años de prisión para quienes reciban fondos que se utilicen para actividades contrarias al Estado cubano—.
También los han extorsionado económicamente al obligarlos a devolver fondos obtenidos como parte de programas formativos o por supuestamente colaborar con los medios independientes.
La campaña represiva no es nueva. Durante años el poder ha intentado neutralizar a voces disidentes con similares tácticas. Los testimonios de la activista Sayli González, de los periodistas Leandro Garvey y Pedro Sosa y del ilustrador Irán Hernández lo confirmaron en el live «Así reprime la policía política en Cuba: testimonios» el 7 de octubre de 2024.
Las declaraciones de Garvey y Sosa indican que los obligaron a participar en entrevistas grabadas que luego fueron tergiversadas y utilizadas por los medios estatales.
Sosa recordó que su historia con la policía política inició por apoyar la Marcha Cívica por el cambio de Archipiélago. En noviembre de 2021, decenas de activistas, periodistas y opositores fueron interrogados a raíz de la convocatoria de esa plataforma. Describió, además, que el modus operandi de la policía política es hacerte creer que tu situación solo depende de ti y generar una sensación de culpabilidad en los interrogados.
«Nos sentimos culpables de que nuestra familia esté sufriendo y ellos manejan muy bien eso, y juegan mucho con eso», dijo.
Irán Hernández explicó que, en su caso, los agentes de la Seguridad le enviaron un mensaje con el director del suplemento humorístico Xel2, Wimar Verdecia, para que se retractara de haber colaborado con elTOQUE.
«(...) Al final terminan obligándote bajo amenazas, extorsiones, bajo presión, y eso fue lo que pasó con nosotros. Entonces, ya cada cual buscó la vía para el exilio». Nosotros tres hablamos (Wimar Verdecia y Mary Esther Lemus) y acordamos que el camino era ese, el exilio, porque trabajamos haciendo sátira política», comentó.
Antes de irse de Cuba, Hernández trabajó en Matraca —otro suplemento de elTOQUE— bajo el pseudónimo de Danilo. «El acoso y las presiones que uno recibe a veces son muy solapadas o sutiles. Muchas veces tú no tienes manera de decir: “esto lo hizo la Seguridad del Estado”, porque ocurre de maneras muy oscuras», sentenció el artista.
El periodista José Leandro Garvey explicó que, durante sus interrogatorios, le exigieron una renuncia pública al periodismo independiente y filmar un video que podrían usar para extorsionarlo en el futuro. Cuando Garvey accedió a publicar la renuncia, las autoridades no quedaron satisfechas:
«Me llamaron días después para decirme que no les había gustado lo que había publicado, que debía entregar mis medios de trabajo —laptop y celular— y grabar un video en el que respondiera ciertas preguntas. El video sería para tenerlo como evidencia, aunque me aseguraron que no lo publicarían, pero sabíamos que podrían usarlo en cualquier momento en Razones de Cuba».
El hostigamiento psicológico fue constante. «Siempre me decían: “Piensa en tu familia, en lo que les puede pasar”», agregó Garbey.
El 27 de octubre de 2022, varios periodistas de elTOQUE fueron expuestos en un programa de Razones de Cuba e incriminados como «mercenarios».
De acuerdo con el testimonio de Pedro Sosa, parte de su familia vio el programa televisivo.
«Sentí miedo porque a mi abuela le pudiera pasar algo. Por el susto, por pensar en lo que iba a venir para mí, lo que podía pasar. Y también por cómo iba a ser mi vida a partir de ese momento. Porque uno siempre tiene metido en el cerebro esto de los actos de repudio», contó.
En el caso de Saily González, el acoso comenzó desde la universidad, pero aumentó cuando inició su emprendimiento y realizó críticas al Gobierno en redes, tras el 11J. Desde el 14 de enero de 2022, se intensificó la represión contra ella por llevar un habeas corpus por la liberación de familiares del preso político Andy García Lorenzo.
Saily comentó que su interrogatorio más largo fue de 14 horas, en uno la agredieron físicamente, en otro la desnudaron e intentaron burlarse de su cuerpo. «En tres ocasiones me tiraron cosas a la puerta. Huevos, me tiraron 18 huevos en medio de la crisis alimentaria en Cuba», relató.
Entre 2022 y 2024, la Policía política obligó a exiliarse, al menos, a 150 periodistas cubanos.
Al respecto, Garvey dijo que necesitaba irse porque no podía más:
«Nosotros que estamos exiliados cargamos una cruz: no podemos regresar. (...) Lo peor fue ver a mi mamá llorando, diciéndome que no regresara más al país. Yo no tengo país (...). Estoy viviendo en el exilio, pero no es mi lugar».
Saily González, por su parte, comentó que su primer año de exilio fue para respirar la libertad, pero luego, en el segundo, comenzó a desesperarse y agregó: «porque nosotros no tenemos a dónde virar». A quienes hoy sufren la represión del poder cubano, González recomendó tener redes de apoyo, porque el Estado busca romper la solidaridad entre cubanos.
La actual escalada represiva es continuación de las tácticas que las autoridades cubanas han empleado en los últimos años para silenciar a los periodistas independientes. Ahora los amenazan directamente con la cárcel y les expropian medios de trabajo y fondos.
Artículo 19 y el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), entre otras organizaciones internacionales, han documentado y denunciado los ataques a la prensa independiente cubana.
comentarios
En este sitio moderamos los comentarios. Si quiere conocer más detalles, lea nuestra Política de Privacidad.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *