El aula de nuevo ingreso del curso escolar 2024-2025 de la carrera de Periodismo en la Universidad de La Habana (UH) contará con la matrícula más baja de ―al menos― los últimos diez años. La reducción puede ser resultado de la obligatoriedad del Servicio Militar Activo (SMA), requisito introducido en 2024 para las jóvenes que aspiren a ser periodistas.

El decrecimiento en la cantidad de alumnos que comienzan los estudios de Periodismo trascendió en el Segundo Pleno de la Unión Nacional de Periodistas de Cuba (UPEC). «No tenemos matrículas para el curso 2024-25», dijo Maribel Acosta, presidenta de la Comisión Nacional de carrera, durante el encuentro. Fuentes cercanas a la Facultad de Comunicación (que prefirieron permanecer anónimas) precisaron a elTOQUE que el futuro primer año arrancará en septiembre con apenas cinco estudiantes. 

De acuerdo con las fuentes, la instauración del SMA como requisito de ingreso para las mujeres representa el último de los filtros establecidos por el Partido Comunista para acceder a la carrera. Las modificaciones van encaminadas a aumentar el control ideológico sobre los futuros profesionales de la prensa estatal, en un contexto de éxodo migratorio y crisis económica. 

Ambos factores impactan de forma negativa en la permanencia de los estudiantes en la carrera y de los profesionales en los medios de comunicación. Lo anterior fue reconocido por algunos de los participantes en el pleno y también durante el Congreso de la UPEC en noviembre de 2023, cuando la organización informó que desde mayo de 2021 hasta ese entonces, 271 profesionales causaron baja tras abandonar el país.

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Datos dispersos y muchas veces desactualizados indican que las graduaciones de Periodismo han continuado incluso con cifras récords, pero buena parte de los profesionales no están donde el Partido y la UPEC esperaban.

Los cambios para acceder a la carrera de Periodismo comenzaron en 2022, cuando el Colegio Universitario ―proyecto experimental mediante el que estudiantes con buenos resultados académicos cursan el último año del bachiller en instituciones de educación superior― pasó a ser la única vía de ingreso. 

En principio, la experiencia se aplicó solamente en la Universidad de La Habana, aunque de forma paulatina se extendió al resto del país. La decisión implicó la anulación de las otras opciones habituales. A saber: pruebas de aptitud aplicables a alumnos de duodécimo grado, los provenientes de la Orden 18 y quienes se presentaban por concurso.

En consecuencia, las muchachas que hayan culminado de manera satisfactoria el Colegio Universitario en 2024 deberán incorporarse al SMA y esperar hasta 2025 para comenzar sus estudios. En septiembre de 2024, únicamente podrán iniciar la docencia los varones que hayan concluido el Servicio Militar o personas que, con independencia de su género, resultaron no aptas. 

Quedaría claro entonces por qué solo cinco alumnos en la UH comenzarán la carrera de Periodismo el venidero septiembre, si se tiene en cuenta que ―según datos ofrecidos por las fuentes antes citadas― poco más de una veintena de estudiantes egresó satisfactoriamente del Colegio. Se desconoce cuántos alumnos ingresarán en el resto de universidades del país, pero históricamente la capital ha agrupado la mayor matrícula.

Las medidas tomadas en aras de restringir el ingreso no incluyeron la consulta previa con el personal docente. Así lo cuestionó de forma pública en el II Pleno de la UPEC Maribel Acosta, también jefa del Departamento de Periodismo de la UH, y Ariel Terrero, decano de la Facultad de Comunicación. En palabras de Acosta, «han desatendido» ―en alusión no explícita al Partido― las sugerencias de los profesores de cambiar la decisión de obligatoriedad por un concentrado militar de menos tiempo. 

«La academia no fue parte de los debates, nunca se nos preguntó, pero desde ese día expresamos que la decisión es un zarpazo a la carrera, cuando no tenemos estudiantes suficientes en ella», señaló Acosta.

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Cuba se sitúa actualmente en el lugar 173 de la Clasificación Mundial sobre la Libertad de Prensa que emite la ONG Reporteros sin Fronteras, y es el país con la peor situación de libertad de prensa en América Latina.

La profesora comunicó que la actual matrícula para el Colegio Universitario de Periodismo cuenta, hasta junio de 2024, con 22 estudiantes. Aunque la cifra pudiera aumentar una vez efectuada la segunda convocatoria de pruebas de acceso fijada para el 13 de julio, el número actual apenas ronda el 50 % de la cantidad de alumnos que solía tener la carrera en los últimos cinco años. 

Por su parte, Ariel Terrero afirmó que la decisión de obligar a las jóvenes a pasar el SMA es un fracaso desde cualquier punto de vista, porque no estimuló el ingreso a las universidades y no supuso un aumento de la cantidad de mujeres en el Servicio Militar. 

En 2019, la prensa estatal cubana contaban con una cobertura inferior al 40 %. A finales de 2023, la dirección de la UPEC reconoció que persistía el déficit de personal, contabilizado para la fecha en 600 profesionales. Como medida de contención, asistentes al pleno propusieron diseñar diplomados y cursos de reorientación profesional para acelerar la formación de periodistas y cubrir la demanda en la prensa estatal, estrategia a la que el país recurrió en los años noventa y a principios del 2000. 

La obligatoriedad del SMA para las jóvenes que aspiren a convertirse en periodistas se produce en un contexto polémico en torno al Servicio Militar en Cuba. Entre los casos de fallecimiento y lesiones graves ocurridos en los últimos años figuran la muerte de jóvenes en el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas.